Sicariato frustrado: Hombre pagó para que sujeto vestido de abuela matara a su madre

Un perturbador caso ha dado que hablar en La Serena, luego de que un sujeto disfrazado de abuela ingresó a un condominio donde intentó asesinar a una mujer.

Lo que no tenía lógica, terminó siento un sicariato frustrado, pues el hijo de la que sería la víctima, contrató a un hombre de 24 años para que efectuara el crimen. Pero esto no ocurrió, pues el delincuente se equivocó de departamento.

Esto ocurrió en abril de este año y ha sido investigado gracias a los registros de las cámaras de seguridad del lugar donde se muestra que el sujeto con bastón, peluca y encorvado, ingresó a los edificios pasando sin registro del conserje, quien una vez que vio entrar a la supuesta abuelita, se acercó para ayudarla.

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Ante esto, el sicario no hizo caso a lo que el conserje le decía y con el bastón que utilizaba para su caracterización, golpeó al trabajador de más de 70 años, dejándolo tendido en el suelo.  Luego de esto, se dirigió al primer piso, ya que en uno de esos departamentos vivía la mujer de 73 años, quien era el objetivo.

Eso si, el sujeto ingresó a otro departamento, donde había una mujer embarazada durmiendo a quien disparó en tres oportunidades, aunque la pistola se le trabó. La mujer despertó y luego de forcejear con el delincuente, el arma se disparó contra el techo y la bala rebotó en la cama. El arma se desarmó por lo que el sicario se vio obligado a escapar del lugar.

Escapando del lugar, el delincuente se subió a un vehículo donde lo esperaba el hombre que había pagado el servicio, es decir, el hijo de la mujer de 73 años quien había estado intentando tapar la patente de su vehículo con unas mascarillas. Una vez en el auto, ambos escaparon del lugar.

Tras meses de investigación, se logró dar con el paradero de ambos sujetos y de una tercera persona, una mujer que hizo el nexo entre el hombre y el sicario. 

Según la investigación de Fiscalía, en un principio el hombre estaba dispuesto a pagar entre diez y once millones al sicario para que mate a su madre de 73 años. Sin embargo, producto de problemas económicos, el acuerdo comenzó a modificarse, llegando a una suma aproximada de un millón de pesos. 

Además, fue precisamente a raíz de dichos problemas económicos, que se contrató al sicario. El plan consistía en que tras matar a la madre, el hijo cobraría la herencia correspondiente.